La seducción de una de las culturas más sugerentes e inspiradoras queda atrapada en una de las manifestaciones artísticas más bellas que nos regala el país del sol naciente, el ikebana.
El ikebana conjuga diversos elementos como flores, hojas, ramas, cereales y semillas que a través de patrones de textura, forma, color y líneas crean armonía. Esto lo lleva más allá de una decoración floral, convirtiéndolo en una construcción única y artística.
Si bien el ikebana es considerado como una terapia de relajación, meditación e interiorización, la sensación de paz y tranquilidad que estas brindan la convierten en una excelente opción para decorar bodas de estilo oriental, eventos minimalistas, decoraciones tipo lounge, reuniones spa o eventos en la playa.
El ikebana puede ir solo o acompañar un bonsái y decorar diferentes áreas del evento–sobre todo en mesas, bufetes o fuentes.
Otra característica del ikebana es su empleo del minimalismo. Es decir, un arreglo puede contar con un número mínimo de flores esparcidas entre los tallos y hojas.
Créditos: Arreglos del Ikebana Ohara School y Baiko & JW
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